jueves, 25 de octubre de 2012

Naturaleza del crimen



(CNN) — La controversial noción de que la naturaleza criminal esté arraigada biológicamente o que pueda ser heredada despierta la atención a la comunidad científica.
Adrian Raine, psicólogo de la Universidad de Pensilvania, está realizando algunos experimentos fascinantes para descubrir los rasgos cerebrales de un comportamiento criminal, y qué tipo de intervención puede prevenir que la gente se vuelva delincuente. 
Si existe una influencia genética y biológica sobre el crimen, ¿hasta qué punto es influyente la crianza?
Más de 100 estudios han mostrado que la mitad del crimen está, hasta cierto nivel, bajo control genético. Esto también significa que los factores ambientales, como la crianza, el abuso, la pobreza, la discriminación y el desempleo representan la otra mitad. 
Por tanto, la parte de la crianza es tan importante como la naturaleza. Desde hace varias décadas, las investigaciones de criminología se han concentrado sólo en la parte ambiental. Si queremos detener el crimen, si queremos comprender las causas y desarrollar programas de tratamiento para atacar las causas, debemos entender todas las piezas.   
¿Qué distingue a los agresores reincidentes de los criminales en remisión, que pueden ya no cometer más delitos?
Las investigaciones sobre infractores jóvenes han mostrado que algunos infractores que no han cometido un crimen en cuatro años aún tienen las mismas anormalidades cerebrales que los agresores reincidentes, pero éste es otro ejemplo de la importancia que puede tener el ambiente. 
Las personas que no siguen cometiendo crímenes pueden tener una madre o padre amoroso, un gran maestro que se vuelve un modelo a seguir o una relación romántica intensa. Enamorarse, comprometerse, casarse… todo esto puede tener un gran papel en la salida del camino biológico.
El ambiente puede cambiar el cerebro, e incluso si tienes los factores de riesgo, no son tu destino. Quizás es el balance entre el riesgo y los factores de protección, que en realidad es lo más importante. No hemos profundizado en esa investigación, y debemos hacerlo.

Crimen y cerebro.


Lo más importante
  • Estudios muestran que la mitad del crimen está bajo control genético; los factores ambientales representan la otra mitad
  • Los ácidos grasos de omega 3 aumentan la energía cerebral y combaten el comportamiento antisocial y la agresión en niños
  • La actividad cerebral durante acertijos éticos muestra que la amígdala, región cerebral para la respuesta al miedo y las emociones, no está tan activa cuando los psicópatas piensan en dilemas morales

jueves, 18 de octubre de 2012

Mientras dormimos nuestro cerebro se comporta como cuando recordamos



El cerebro es realmente increíble. Cientos de investigadores trabajan alrededor de este órgano para intentar desentrañar su funcionamiento y así hacer frente a, por ejemplo, enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson. Una de las últimas investigaciones llevadas a cabo en la UCLA, la Universidad de California, ha descubierto que, mientras dormimos nuestro cerebro se comporta como si estuviera recordando algo.
Para llegar a esta conclusión, el equipo del profesor Mayank R. Mehta midió simultáneamente la actividad de las neuronas en distintas partes del cerebro durante la formación de la memoria. De este modo consiguieron determinar qué partes del órgano se activaban y desactivaban en las distintas fases. De hecho midieron esta actividad en tres partes esenciales del cerebro: el neocortex, el hipocampo y la corteza entorrinal.
Y fue precisamente en este último lugar donde los científicos descubrieron un hecho novedoso y que puede contribuir notablemente a la neurociencia. Hasta el momento los estudios previos habían comprobado la importancia del "diálogo" entre neocortex y el hipocampo en el proceso de formación de lamemoria durante el sueño. Ahora, gracias a esta nueva investigación se ha comprobado que la corteza entorrinal que conecta estas dos regiones también juega un papel muy importante.

Resultados nuevos y sorprendentes

Como explica el propio Mehta, "los resultados son completamente nuevos y sorprendentes. De hecho el trabajo de la memoria ocurre en la corteza entorrinal incluso bajo los efectos de la anestesia". Este estudio aporta luz a cómo afecta a la salud, a la memoria y al aprendizaje la falta de sueño. Como apunta el mismo investigador, "cuando te vas a dormir, aunque sea en una habitación oscura y silenciosa sin información sensorial, el cerebro continua muy activo". Es más, centrándose en la corteza entorrinal, "cuando el neocortex se inactiva las neuronas de la corteza entorrinal interior se mantienen activas, como si estuvieran recordando alojado recientemente en el neocortex" explica Mehta, en un fenómeno conocido como persistencia de la actividad espontánea.
Pero además, según los investigadores, este periodo de recuerdo mental de las neuronas entorrinales se prolongaba mucho en el tiempo. Mientras que normalmente la actividad cerebral cambia en milésimas de segundo, en este caso, incluso bajo anestesia, esta actividad persistente duraba más de un minuto.
En boca de Mehta, investigador principal del proyecto, "es un modo completamente distinto de pensar sobre la consolidación de la memoria", apuntando que "hemos encontrado un nuevo jugador involucrado en este proceso y que tiene un enorme impacto".


Javier Flores
11/10/2012